viernes, 17 de septiembre de 2010

Viajes temporales



Contemple un gran océano, con muchas especies de animales en su habitad.
En un instante, viaje a un lugar remoto, donde no existía nada. Yo estaba en el centro donde anteriormente estaba ese hermoso océano.

¿Qué esta sucediendo aquí?  Grite atemorizada, deseaba seguir apreciando aquel hermoso paisaje. De la nada aparece una luz y me comienza a hablar

Haz viajado, eso es lo que ha sucedido. Tu estas viendo tu propio futuro, lo que viste anteriormente, eran tus pensamientos, emociones, sensaciones, que un futuro muy pronto los perderás y se convertirán en lo que ves ahora en este lugar  Decía eso mientras se alejaba, yo fui tras ella  tenia muchas preguntas que hacerle deseaba que alguien me lo respondiera. Pero de repente la luz desapareció, y mire a todos los lados en busca de esa luz, pero no la encontré.

Me di media vuelta y vi a una hermosa mujer con vestiduras blancas, parecía un ángel que había venido en mi busca para llevarme a un lugar muy lejano, me acerque a ella, estaba deslumbrada por aquella belleza que estaba al frente de mis ojos. Y quizá ella podría responder mis preguntas.

Ella me miraba fijamente, era realmente dulce su mirada pero también con un poco de tristeza, sus ojos estaban un poco húmedos, no sabía por que podría estar así. A lo mejor ella sabía lo que me ocurriría en un tiempo más y no seria agradable.

Al estar a pocos centímetros de ella, comienza a correr de una forma encantadora, corría bastante rápido aun así, sin perder la elegancia. Y se comenzó a escuchar un eco que decía:

“Pobre niña que no sabe en el lugar que esta en este preciso momento, que muy pronto llorará sin parar, vuelve al lugar de vienes para que no te enteres de algo que te destruirá”

Al oír aquello me detuve, quizá de verdad no debía estar ahí, y no sabía cual era la razón por la cual deseaba entenderme tanto. O simplemente ya sabia lo que va suceder más adelante, pero siempre evito todo.

Comencé a dar vueltas y vueltas alrededor de aquel desolado lugar, lo único que observaba  un gran desierto, no existía nada de vida.

Me pregunte a mi misma ¿Qué me va a suceder para llegar a este estado?,  no comprendo en un abrir y cerrar de ojos, en una esquina de aquel paisaje seco, aparecieron unos témpanos de hielo. Y en lo mas alto de esos témpanos, se encontraba un hombre con bastante años su arrugada lo delataba, aun así tenia un buen estado físico ya que corría sin parar por aquel lugar.

Pequeña niña…me pregunto que es lo que te ha sucedido, te haz vuelto tan fría e indiferente. Tus sentimientos lo haz guardado tanto, te estas haciendo daño.
Aquí esta la prueba, observa las grietas en el hielo…Este es tu corazón, que se ha vuelto de piedra, aun tengo la esperanza de alguien llegue a derretir el hielo que existe en ti. Y puedas ser realmente feliz, quizá esa persona llego pero tú no le dejas avanzar, por el miedo de que descubras como eres realmente y te abandone como la mayoría de las personas lo  han hecho Al terminar de pronunciar eso, desapareció todo aquel lugar y volví donde estaba ese gran océano cristalino.

Debería cuidar más lo que tengo, y recuperar lo que he perdido…

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